La morcilla ha recibido la visita de un personaje inquietante. Se llama Arh-Arh, y trabaja como filósofo de garrapatas en una distante constelación. Para trasladarse por el espacio utiliza una extraña y jugosa lengua de azafrán, que le permite viajar a grandes velocidades. Aquí les dejamos una fotografía que la morcilla le sacó antes de regresar a sus pagos, allá en la demencia constante del universo.
Usas imaginación a borbotones. Me gusta tu estilo, yo también soy guionista.
ResponderEliminarSaludos de un bohemio.
www.realismosucio.com
y si me muero antes quiero un epitafio de tu pluma incisiva, claro
ResponderEliminarTruman:
ResponderEliminarGracias por tus comentarios!
Muniequera:
Claro! jajaj! Ya vendrá la Condesa Fideos y su séquitos de salsa de tomate
Abrazo!
Vul